El miércoles por la noche, el programa “Buenas Noches Familia” encendió su pantalla con una misión clara: reunir fondos para Galo, un niño de dos años que padece parálisis cerebral y cuya familia necesitaba 25 mil dólares para un tratamiento en México, sin contar pasajes ni alojamiento.
Un espectáculo solidario con magia y emoción
Para incentivar las donaciones, el Mago Matus, amigo del padre de Galo, subió al escenario ofreciendo un espectáculo lleno de trucos y fantasía. La audiencia respondió de inmediato: en pocos minutos, la cifra recaudada alcanzó los 137 millones de pesos, superando ampliamente el objetivo inicial. La emoción invadió a la familia de Galo, a camarógrafos y al equipo de producción.
La generosidad que no se detiene
Lo que sucedió después sorprendió a todos: aunque la meta estaba cubierta, las donaciones siguieron llegando. Al final del segmento, Guido Kaczka anunció con la voz quebrada que la cifra definitiva había alcanzado los 205 millones de pesos. “Esto es la Argentina. Ya está, ya se juntó, y la gente sigue y sigue. Es impresionante. No es para llegar, es para ayudar”, expresó el conductor visiblemente emocionado.
Una demostración de solidaridad colectiva
El caso de Galo se convirtió en un ejemplo de solidaridad masiva, donde la televisión y la generosidad del público se unieron para cambiar la vida de un niño y su familia. La recaudación récord demuestra que, más allá de las metas, la voluntad de ayudar puede superar cualquier expectativa.
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