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El paro de trabajadores municipales de Arrecifes cumple dos semanas y media sin solución. Las negociaciones siguen trabadas, con fuertes cruces entre el intendente Fernando Bouvier y el Sindicato. Este viernes habrá una audiencia clave en el Ministerio de Trabajo en Pergamino.

ARRECIFES, BUENOS AIRES – El conflicto entre la Municipalidad y el Sindicato de Trabajadores Municipales ingresó en su día número 15 de paro consecutivo, mientras las diferencias salariales y de condiciones laborales mantienen en vilo a la ciudad. La medida de fuerza, que ya afecta distintos servicios esenciales, sigue sin vislumbrar un acuerdo cercano.

Un cruce que expuso la tensión

Tras la reunión mantenida el martes con el ministro de Economía bonaerense, Pablo López, quedó confirmado que la Provincia no mantiene deudas con el Municipio. En ese marco, el intendente Fernando Bouvier le advirtió al secretario general del gremio, Juan Maury: “Si no levantan el paro, no sé si vamos a poder pagar los sueldos este mes”.

La respuesta del sindicalista fue contundente: “Vos seguí jodiendo con la gente que te van a tomar la Municipalidad”. El intercambio reflejó la dureza del conflicto y la falta de canales de diálogo efectivos.

Reclamos y posturas

Desde el Sindicato, los trabajadores reclaman un 20% de aumento salarial y mejoras en otras condiciones laborales. Aseguran sentirse “destratados” y denuncian que, mientras se argumenta falta de recursos, el Ejecutivo “sigue contratando gente y gastando en cosas innecesarias”.

Por su parte, el intendente Bouvier calificó de “barbaridad” el pedido salarial y sostuvo que el Municipio no puede pagarlo. Además, insiste en que la administración no tiene margen para acceder a lo solicitado.

Lo que viene

Este viernes, a las 11:00, se realizará una nueva audiencia de conciliación en la delegación del Ministerio de Trabajo bonaerense en Pergamino, donde volverán a sentarse representantes de ambas partes. Se estima que el Ministerio podría dictar la conciliación obligatoria, lo que forzaría a los trabajadores a retomar sus tareas mientras continúan las negociaciones.

Sin embargo, el conflicto de fondo está lejos de resolverse, ya que el Ejecutivo no atendió aún ninguno de los reclamos del Sindicato más allá del aspecto salarial. La incertidumbre persiste y el clima de tensión crece en Arrecifes.